Yo he estado ahí. He creído no ser suficiente.
Y lo cierto es que lo que no debemos hacer es reprendernos para convertirnos en una versión mejor de nosotros mismos.
No obstante, a pesar de que cada día soy más consciente de esto, en ocasiones (aunque cada vez menos) todavía me sigo convirtiendo en víctima de mis propios pensamientos negativos.
Estoy segura de que te ves reflejado/a. Todas las personas han estado ahí. Todos hemos tenido días malos y momentos en los que no hemos confiado en nosotros mismos. De hecho, hoy no iba a publicar esto. No pensaba publicarlo porque es algo muy personal. Pero aquí estoy, he decidido hacerlo.
Sé quien quieres ser, eres suficiente.
¡Empieza por ti!
La Autoestima, el amor propio y el respeto hacia ti mismo/a son cosas que no te puede dar otra persona.
Si quieres ganarte el respeto de otros, comienza por respetarte tú mismo/a. Quiérete como si fueras lo más especial del mundo. Porque lo eres. Tú eres responsable de valorarte. Y esta responsabilidad significa no dejar que otros piensen, hablen o decidan por ti. Significa usar tus propios medios para hacer que las cosas pasen.
Estás andando tu propio camino. A veces, sentimos inseguridad porque comparamos nuestra vida entre bastidores con la de otros en sus grandes éxitos públicos. Y eso te hace creer que no eres suficiente.
Olvida lo que están haciendo y consiguiendo los demás.
Tu vida se centra en romper TUS propios límites para vivir TU mejor vida. Enfócate en ti.