Tú puedes querer sexo cada día, y tu pareja estar satisfecho/a con un par de veces a la semana (o menos), o viceversa.
Si presionamos demasiado a nuestra pareja para tener relaciones sexuales, produciremos el efecto contrario al deseado: cuando más insistamos, más se sentirá obligado/a y lo rechazará o, peor aún, lo hará por obligación.
No hay más remedio que comunicarse, contar cuáles son los deseos de uno y otro y llegar a acuerdos.
Así y todo, no tiene buen pronóstico una relación en la que uno de los dos tiene una libido muy alta y otro muy baja.
Con el tiempo el que menos deseo siente aún sentirá menos…
Las relaciones conscientes tienen libertad de expresión y hay comunicación transparente.

ÉSTOS SON TUS SIGUIENTES PASOS
Léelos atentamente y descubre mis recomendaciones

No estás satisfecho/a con tus relaciones sexuales
Sientes que no eres suficiente para él/ella
La pareja nos hace de espejo.
Si continuamente te sientes inferior es porque ese malestar que te está generando el sentirte inferior está afectándote no sólo en el área de pareja sino también en otras más de tu vida.
Existen diversas razones por las cuales puedes estar sintiéndote inferior a tu pareja, sin embargo, todas ellas tienen el mismo origen.
Hay que trabajar en aumentar la autoestima y la autoconfianza.
Enfócate en ti.